Detrás de la puerta

Clic. El sonido fue lejano, casi tímido. Lo suficiente para ignorar. Si no se hubiera repetido casi de inmediato. Con un hermanito que lo acompañara. Clic-clic. La pareja fue suficiente para hacerme subir la cabeza. No había sido mi imaginación, ni era el sofá en el que estaba sentado. Cuando sonó una tercera vez --clic…

“Tenemos que decirte algo”

La sorpresa en su cara cuando entraron y me vieron sentado esperándolos no me causó la satisfacción que esperaba. Me decía que creían que yo no sabía, que lo que vendrían a decirme sería noticia. Me sentí, por la enésima vez en mi vida, subestimado. Mi furia subió un grado. Mi garganta se secó y…

Moscas en el carro

La mosca se golpeaba contra el vidrio del carro con tal fuerza que sonaba como piedras cayendo sobre techo de zinc. Para Armando, sonaba como piedras en su cerebro. Y cada una parecía quitarle un poco más de su sanidad. Armando se hablaba a sí mismo, en un desesperado intento por calmarse. Estaba en su…